¿Dios es varón?

¿Dios es varón?

Por Patrick Franklin

Cuando enseño acerca de la Trinidad en mi clase de introducción a la teología, el tema de Dios y el género surge a menudo. “¿Dios es varón?”. Pensemos acerca de esto.

La Biblia a menudo se refiere a Dios con pronombres personales masculinos. Continuado esta práctica bíblica los cristianos a menudo dicen “Él” cuando se refieren a Dios. El lenguaje trinitario es predominantemente masculino (“Padre” e “Hijo”) aunque el “Espíritu Santo es más elusivo”. Muchos libros cristianos populares celebran las cualidades más masculinas de Dios (especialmente libros para hombres y libros sobre “liderazgo”): Dios es un héroe, un guerrero, un rey triunfante y así en adelante.

Incluso así, no me sentiría cómodo diciendo que Dios es varón. De hecho, me siento impulsado a argumentar que aplicar esta idea a Dios de manera absoluta y son condiciones es falsa y engañosa.

Es cierto que la Escritura habla de Dios predominantemente en lenguaje masculino. Sin embargo, también emplea lenguaje, imágenes, y metáforas femeninas con referencia a Dios.

Por ejemplo, Dios es descrito como una madre:

  • Como una mujer en labor de parto (Isaías 42:14).
  • Como una madre que no olvida a los niños que cría (Isaías 48:14-15).
  • Como una madre que consuela a sus hijos (Isaías 66:12-13).
  • Una madre que da a luz y protege a Israel (Israel 46:3-4).
  • Una madre que da a luz a los israelitas (Deu. 32:18).
  • Una madre que llama, enseña, sostiene, cura y alimenta a sus niños (Oseas 11:1-4)

Otras imágenes maternales pueden ser encontradas en Salmos 131:2; Job 38:8, 29; Proverbios 8:22-25; 1 Pedro 2:2-3; y Hechos 17:28.

La Biblia también describe a Dios en términos de roles comúnmente femeninos en los tiempos bíblicos:

  • Una costurera haciendo ropas para Israel (Nehemías 9:21).
  • Una partera atendiendo un parto (Salmos 22:9-10ª, 71:6; Isaías 66:9).
  • Una mujer cocinando pan (Lucas 13:18-21).

Aunque estas tareas no son inerentemente femeninas, la Escritura apela a estos roles culturalmente femeninos para describir a Dios.

Además, la Biblia habla de Dios usando imágenes de aves o animales hembra:

  • Dios actua como una ave protegiendo a sus pichones (Salmos 17:8; 36:7; 57:1; 91:1, 4; Isaías 31:5; Deuteronomio 32:11-12)
  • Como una águila (Deuteronomio 32:11-12; Éxodo 19:4; Job 39-27-30)
  • Como una gallina (Mateo 23:37; Lucas 13:34; cf. Rut 2:12)
  • Como una osa (Oseas 13:8)

Finalmente, el Espíritu Santo a menudo es asociado con imágenes y funciones femeninas, como el nacimiento y renacimiento, la vida, el agua, como consolador y consejero, y el amor que lo une todo, etc (e.g. Juan 3:5-6; Juan 14; 1 Juan 4).

Génesis 1:26-27 enseña que tambo el varón como la mujer reflejan la imagen de Dios.

Si esto es verdad, entonces no hay diferencias significativas entre el varón y la mujer, esto implica que solo juntos reflejan la imagen plena de Dios. Esto también implica que Dios trasciende ambas categorías y que se caracteriza tanto por cualidades masculinas y femeninas.

Por lo tanto, la Escritura puede emplear tanto lenguaje masculino como femenino para hablar acerca de Dios. Si uno o el otro predomina en última instancia no es significativo. El punto principal que se debe entender es que todo este lenguaje es analógico y no literal cuando se usa en referencia a Dios. Todas las palabras para describir a Dios están limitadas. ¿Por qué esto es así? Pues porque “varón” y “mujer” son categorías creadas”. Son necesarias para la sexualidad y la reproducción. Dios no necesita estas categorías porque no se reproduce de esta manera. Dios es un Espíritu trascendente e infinito.

Decir que “Dios es varón”, moviéndonos de decir que “Dios es cómo…” a decir que “Dios es….” sin usar calificativos, nos lleva a la idolatría.

Esta clase de declaraciones limita a Dios a categorías creadas, finitas y antropomórficas. Terminamos visualizando un Dios creado en nuestra imagen (una proyección humana) antes que ver a los seres humanos a la imagen de Dios.

El peligro de la idolatría es que tiende a mantener mentalidades dañinas y opresivas.  Por ejemplo, al ver a Dios como “varón” tendemos a proyectar nuestras propias ideas culturales de “masculinidad” sobre Dios. Entonces usamos ideas inventadas sobre Dios para justificar el prejuicio masculino en nuestras propias culturas. Tenemos que ser muy cuidadosos con esto.

Finalmente, tal vez una mejor pregunta que “¿Dios es varón?” puede ser “¿son los hombres como Dios?” y “¿son las mujeres como Dios?”. “¿Nos asemejamos a Dios es nuestro carácter, en nuestras acciones, en nuestra relación con otros, en nuestro trato hacia las criaturas, en nuestra vocación y responsabilidades y en nuestra mayordomía de los recursos materiales de Dios? Al cambiar la pregunta ponemos el foco en cómo el carácter y las acciones de Dios deben determinar cómo vivimos nuestra concepción cultural de la masculinidad y femineidad, y no al revés.


Fuente: http://juniaproject.com/is-god-male

One thought on “¿Dios es varón?

  1. Coincido con su exposición. He podido ver que muchos insisten en que Dios es hombre solo para reforzar su machismo y eso tiene consecuencias nefastas para la vida de muchas personas y familias. Además, especialmente en estos tiempos, puede ser una barrera para la predicación. Dios es Dios.
    Gracias y bendiciones.

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